OACNUDH lamenta que militares tomen control de centros penales
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH) lamentó la decisión de devolver el control y las operaciones del sistema penitenciario nacional a la Policía Militar de Orden Público (PMOP).
La OACNUDH insta a las autoridades a priorizar la reforma integral del sistema penitenciario bajo una autoridad civil, que garantice la seguridad a través de un enfoque especializado en el fenómeno de los grupos criminales y que priorice la rehabilitación y reinserción social de las personas privadas de libertad.
Además condena el asesinato de al menos 46 mujeres privadas de libertad en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) en Támara el pasado 20 de junio y expresa solidaridad con las familias de las víctimas.
Responsabiliza directamente al Estado, señalando que este es responsable de proteger la vida e integridad de las personas bajo su custodia, especialmente de las poblaciones vulnerables como las mujeres. Destaca la necesidad imperante de acelerar la reforma penitenciaria que involucre a los tres poderes del Estado.
La Oficina hace hincapié en la escasez crónica de agentes de seguridad penitenciaria en los centros de detención, incluyendo la PNFAS, lo que impide garantizar la seguridad y el trato adecuado a la población penitenciaria.
La OACNUDH recomienda que las autoridades mantengan una comunicación fluida y transparente con los familiares de las víctimas, asegurando una investigación objetiva y diligente que establezca responsabilidades de mando en relación con la falta de protección de las personas privadas de libertad. También destaca la importancia de realizar la investigación con una perspectiva de género.
En respuesta a los hechos y ante el riesgo de que ocurran más actos violentos, la OACNUDH destaca la decisión de la Corte Suprema de Justicia de ampliar la aplicación del habeas corpus correctivo a todas las prisiones del país.
Además, exhortó al Estado de Honduras a implementar métodos de seguridad dinámica en todos los centros penitenciarios, que permitan el levantamiento de alertas tempranas de riesgos, la adopción de medidas preventivas y la aplicación de protocolos de emergencia que salvaguarden la vida e integridad de las personas.
La Oficina enfatiza la necesidad de seguir impulsando medidas institucionales urgentes, como el descongestionamiento del sistema penitenciario y la coordinación interinstitucional entre el Poder Ejecutivo y Judicial para el otorgamiento de beneficios penitenciarios y la agilización de los procesos judiciales.
La OACNUDH reconoce las deficiencias estructurales del sistema penitenciario de Honduras, como el hacinamiento, la corrupción, la falta de seguridad y las malas condiciones en materia de derechos básicos.
Sin acciones integrales, enfoques civiles especializados y mayores recursos materiales y humanos, estos problemas continuarán agravándose, lo que generará las condiciones para la repetición de graves violaciones a los derechos humanos.
Asimismo reitera la disposición a brindar asistencia técnica al Estado de Honduras para implementar estas y otras medidas que garanticen la no repetición de estos hechos.
Nación
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