Expolicía testigo confiesa en juicio de JOH que ordenó el asesinato del “fiscal de oro”
02/03/24. El exoficial de la Policía Nacional, Giovanni Rodríguez, subió al estrado en el juicio por narcotráfico contra el expresidente Juan Orlando Hernández en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, siendo así el décimo primer testigo de la Fiscalía, después de Fabio Lobo.
Rodríguez se entregó a las autoridades estadounidenses y ya declaró en el juicio contra Tony Hernández. Contó que tiene siete años e igual número de meses en prisión, “por tráfico de drogas a Estados Unidos. Yo era policía en la Policía Nacional de Honduras”.
El exoficial, según su testimonio, proporcionaba información sobre los controles y operaciones policiales, y acompañaba cargamentos de droga y andaba armado “con M-16 y AR-15”. Se entregó a la justicia de EEUU en 2016.
Logró un acuerdo de cooperación y se declaró culpable de asesinato. Se atribuyó la muerte de Orlán Chávez. “Fue fiscal contra las drogas. Estaba investigando a un primo mío. Encontré gente para matarlo”, confesó.
Rodríguez dijo que trabajó con Víctor Hugo Díaz Morales, alias “El Rojo” (otro narcotraficante) y conoció al expolicía Mauricio Hernández Pineda en la academia de policía. Mauricio Hernández es primo del expresidente JOH y se declaró culpable justo antes del juicio.
Ambos exoficiales daban protección a los cargamentos de droga y estaban protegidos por JOH y Tony, según su propio testimonio. Rodríguez estuvo en prisión “por robar 143 kilos de cocaína. Fui a la cárcel y luego volví a la policía”.
El expolicía hondureño señaló que el exalcalde de El Paraíso, Copán, Alexander Ardón (ya fue testigo del juicio) “dijo que JOH lo estaba protegiendo” y que usaban la casa de Tony Hernández para fiestas con prostitutas.
“Pineda y yo usaríamos la casa de Tony Hernández, Pineda tenía la llave. Tuvimos eventos con prostitutas”, relató.
“En la casa de Tony Hernández vi dinero envuelto en plástico, como en el narcotráfico”, describió. “¿Cuánto dinero viste?”, preguntó el fiscal, a lo que él respondió; “Hasta mi cinturón”.
Luego contó que llamó a la embajada de Estados Unidos y luego a la DEA para entregarse, pero Pineda le advirtió de “tener cuidado de no decir nada en Estados Unidos sobre lo que él, Tony y JOH estaban haciendo en Honduras, que podría ser muy peligroso para mí”.
Contrainterrogatorio de la defensa
Tras finalizar la Fiscalía con sus preguntas, el abogado Renato Stabile de la defensa, comenzó con las preguntas. Le cuestionó sobre si de verdad estuvo en la casa de Tony Hernández, ya que Rodríguez solo afirmó que; “Me dijeron que era la casa de Tony”, pero no vio nada en la casa que demuestre que era la del hermano del expresidente. Los billetes que según vio, eran de 20 dólares.
Rodríguez recordó que fue arrestado por drogas en Honduras, pero evadió la condena por “influencia”.
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